Como es mi costumbre, suelo escribir cosas bastante extensas y complejas. A una semana de la entrega tengo mitad de lo que pensaba animar. Tratando de avanzar lo máximo posible con la imagen, dejé el sonido para último momento e improvisé un poco. Respecto a la imagen no hice a tiempo de corregir algunos errores que Jimena me marcó, pero quedé bastante satisfecho con como se mueven los personajes y su diseño. Para la entrega trataré de avanzar algo más en la imagen; no creo terminar el relato completo, quedará como proyecto propio, ya que si utilizo toda la semana en terminar las 5, 6 escenas que me faltan, voy a terminar sin el tiempo para conseguir las herramientas y las personas necesarias para un buen diseño sonoro.
Sin más observaciones, espero les guste!
https://vimeo.com/180974849
miércoles, 31 de agosto de 2016
domingo, 21 de agosto de 2016
sábado, 13 de agosto de 2016
Reflexión teórica Animación
Me gusta el mundo de la animación porque me parece que al contrario del video, se pueden llegar a generar universos completamente distintos. Donde el abzurdo es llevado al limite y al mismo tiempo racionalizado como cotidiano. Me parece este aspecto el más fascinante de la animación, al menos personalmente.
Si bien disfruté varios de los fragmentos animados que vimos, por lejos "The sound of Music" de Phil Mulloy fue el que más me interesó. Lo primero que llama mucho la atención es su simplicidad y a la vez complejidad en los personajes y el universo. Trabaja con una paleta monocrómatica, lo que puede dificultar mucho el separar figura fondo al momento de animarlo. Si bien parecería que al ser humanoides más simplificados, el surrealismo de sus figuras creo yo debe más complejizar el trabajo de animación que simplificarlo. Por otro lado también creí entender claramente el mensaje que quiere comunicar, lo expresa cruda y figurativamente. Los movimientos en los personajes son sistemáticos y robotizados, representando su visión de la sociedad como engranajes pasivos en una máquinaria reguladora de comportamiento. Mirando algunos otros trabajos de Mulloy, reconocí en todos los mismos personajes, en algunos con voces humanas, en otros con gemidos, pero siempre llevando al grotesco cuestiones de ética, moral y censura en la sociedad.
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